jueves, 8 de noviembre de 2012

Bram Stoker, nuevo doodle de Google

Google homenajea este jueves a Bram Stoker, el padre de Drácula, en uno de sus característicos doodles


Drácula siembra el terror en el buscador para homenajear a su autor en el 165 aniversario de su nacimiento./lavanguardia.com
 
La historia del vampiro humano más famoso ha sido recreada por el equipo de los de Mountain View para celebrar el 165 aniversario de Stoker. El 'doodle' recrea los personajes y escenas más característicos de la novela. Google vuelve a sorprender a los usuarios con uno de sus llamativos 'doodles'. De esta manera, la compañía homenajea a grandes personajes de la historia de la literatura, el cine o la música.
En esta ocasión, se centra una vez más en la literatura, en uno de los autores que marcó la literatura universal en la época victoriana con una de sus novelas. Este autor es Bram Stoker, el creador del vampiro Drácula. El 'doodle' de este jueves recoge las escenas y personajes más característicos de la obra, con Drácula como protagonista. El aire lúgubre y misterioso de la escena se complementa con el logotipo de Google en color rojo.
Los cuentos de fantasmas de Bram Stoker
Bram Stoker nació el 8 de noviembre de 1847 en el área residencial Clontarh, en Dublín (Irlanda). Su delicado estado de salud debido a diferentes enfermedades cuando era niño le obligó a estudiar en su hogar, mientras su madre le contaba historias de fantasmas y misterios que más tarde le influirían en su obra. Sus primeros relatos de terror, como La Copa de Cristal fueron publicados por la London Society y la obra The Chain of Destiny en la revista Shamrock.
Sin embargo, su obra Drácula fue la más reconocida de su carrera literaria. Según expertos, se trata de una historia ficticia basada en el personaje real de Vlad Draculea Vlad el Hijo del Demonio/Dragon también llamado Vlad Tepes "el empalador". Stoker se inspiró en el actor Henry Irving y en el compositor Franz Liszt para fijar el aspecto del Conde Drácula. Se dice que el escritor se basó en las conversaciones que mantuvo con un erudito húngaro llamado Arminius Vámbéry y que este fue quién le habló de Vlad Draculea.