viernes, 3 de enero de 2014

Una musulmana de 16 años será la nueva heroína de Marvel Comics

En febrero saldrá el primer número: Kamala Khan vive en Nueva Jersey en el seno de una familia paquistaní. Este año, el sello editorial lanzará tres series protagonizadas por mujeres

Imagen de Ms. Marvel, cuyo primer número saldrá a la venta en febrero./revista Ñ./elmundo.es
Se llama Kamala Khan, tiene 16 años, nació en Estados Unidos y vive en Jersey City –justo enfrente de Manhattan– en el seno de una familia paquistaní que profesa el islamismo. Es una superheroína y está a punto de descubrirlo: la revelación será en el primer número de Ms. Marvel, el cómic que la prestigiosa editorial Marvel lanzará en febrero y que tendrá por protagonista a una joven musulmana, algo nada frecuente en el mundo de las historietas, donde abundan los hombres blancos que han venido a salvar el planeta.
La idea de contar la historia de Kamala surgió cuando la editora de Marvel Sana Amanat le contó anécdotas de su infancia como musulmana estadounidence a su colega Steve Wacker. Enseguida se sumaron al proyecto G. Willow Wilson, escritora de cómics convertida al islam, y el dibujante canadiense Adrian Alphona. La joven decidirá llamarse Ms. Marvel para seguir los pasos de su propia heroína –siempre en el mundo de la historieta– Carol Danvers, una rubia de ojos celestes que apareció en viñetas en 1968 sin superpoderes y como oficial de la Fuerza Áerea de Estados Unidos, se llamó justamente Ms. Marvel desde 1977, y hoy es Captain Marvel.
El sello editorial aún no detalló cuáles serán los superpoderes de Kamala, aunque se sabe que tendrá la habilidad de cambiar de forma. Pero sí hay información sobre sus villanos más cercanos: más allá de enfrentar los males y las injusticias que puedan amenazar a su sociedad, la joven deberá afrontar conflictos al interior de su familia. Su hermano Jamir es tradicionalista y conservador, especialmente sobre el lugar que las mujeres deben ocupar en el hogar y en la sociedad, a su padre, un bebedor compulsivo de té, sólo le preocupan sus resultados académicos y que se convierta en médica, y su madre, algo paranoica, teme un embarazo precoz que se produzca por apenas tocar a un hombre.
“Como muchos de los hijos de inmigrantes, Kamala se siente dividida entre dos mundos: la familia que ama, pero que la vuelve loca, y la gente de su edad, que no entiende realmente cómo es su vida en casa”, dijo Wilson en una conferencia de prensa. Es que fuera de casa, esta adolescente en plena edad de rebelión también se encuentra con conflictos cotidianos: sus pares la ven como se mira al “diferente”. Nada sorprendente en un país con algo más de 316 millones de habitantes donde sólo 2,6 millones son musulmanes.
“Es probable que haya algunas reacciones negativas, no sólo de quienes critican el islamismo, sino también de quienes son musulmanes y querrían que el personaje fuera reflejado desde determinada perspectiva”, le dijo Amanat al New York Times. Sobre la cuestión religiosa, Wilson señaló al mismo diario: “Esto no es una misión evangelizadora, como escritora es muy importante retratar a Kamala como alguien que se está peleando con su fe”.
El vocero del Consejo de Relaciones Americano-Islámicas, Ibrahim Hooper, destacó: “Siempre hemos animado a hacer retratos positivos de musulmanes en la cultura popular”, pero matizó: “La única crítica es que por qué va ligera de ropa. Sería bueno si llevara hiyab”, dijo, en referencia al tradicional velo islámico que esconde la cabeza de tantas mujeres alrededor del mundo. Aunque no se ve su cara completa, la tapa del número que Marvel lanzará en febrero alcanza para saber que Kamala Khan deja su cabello morocho libre, al contrario de su madre, que sí lo cubre.
No es la primera vez que Marvel trata los prejuicios que giran en torno a las minorías, no sólo religiosas sino también sexuales. También lo hizo su tradicional rival editorial, DC Comics, aunque no siempre con total libertad: en septiembre del año que acaba de terminarse, los autores de Batwoman decidieron renunciar luego de denunciar que el sello les prohibía que su protagonista, Kate Kane, se casara con otra mujer. Desde DC Comics sostuvieron que no estaban en contra de un matrimonio igualitario, sino de cualquier matrimonio que “cerrara” otras posibles tramas en el futuro.
Habrá que ver cuánta libertad tiene esta nueva heroína, la primera de las tres mujeres que protagonizarán series de Marvel en 2014, ya que también se editarán las historias de She-Hulk y Elektra. Habrá que ver cómo reaccionan los lectores ante la novedad: los que tuvieron una infancia similar a la suya y los que siempre miraron desde lejos. Y cuántas libertades se toma Kamala para rebelarse ante los mandatos religiosos y familiares de su hogar y ante quienes la rodean fuera de casa, rebelarse porque eso hay que hacer a los 16 años, y rebelarse porque los superhéroes rompen las reglas. Aunque, habitual y maquiavélicamente, el fin justifique los medios.

  Otras viñetas que contaron el islamismo

Kamala Khan es la primera mujer musulmana que protagoniza una historia de Marvel Comics, un sello que juega en las Grandes Ligas de la historieta. Pero no es la primera mujer en narrar el mundo islámico a través de las viñetas: entre 2000 y 2003, la historietista iraní Marjane Satrapi publicó los cuatro tomos que componen la novela gráfica “Persépolis”. Allí, Satrapi narró en clave autobiográfica los rasgos más fundamentalistas del régimen islámico que imperaba en su país y que la llevaron a abandonar ese territorio. La historia está contada desde la visión de la niña que Satrapi era cuando en 1979 cayó el reinado del sha de Persia en Irán y se instaló una república teocrática. Por su extremismo, ese sistema se diferenció enseguida de la idea más laica y progresista por la que sus padres habían militado. La historia de Satrapi fue traducida a varios idiomas y adaptada al cine en una película de animación.