Las palabras más cabronas del español, según los gringos./shock.co
Si usted es de los que nunca vio este famoso video de YouTube,
publicado por los hermanos Juan Andrés y Nicolás Ospina en 2012, le
adelantamos que la conclusión del tema es que casi todo lo que se dice
en este idioma tiene un significado completamente diferente para los
latinoamericanos. “En Colombia el mal olor de las axilas es la chucha,
mientras tanto en Uruguay a ese olor le dicen chivo y el diccionario
define al chivo como a una cabra con barbuchas. Y cambiando una vocal la
palabra queda “chucho” y “chucho” es un perrito en Salvador y
Guatemala, y en Honduras es tacaño, y a Jesús le dicen Chucho, con
tantas definiciones ¿cómo se usa esa puta palabra?”.
Tomando en cuenta lo que dicen estos personajes en su video, hablar
español es todo un reto incluso para los hispanohablantes. Un claro
ejemplo de esto, sin ir muy lejos, es lo que pasa en Colombia cuando en
una misma conversación están involucradas personas procedentes de la
región Pacífico, Caribe o Andina. Aquí los regionalismos salen a flote,
la velocidad con la que se dicen las cosas no es la misma y el acento de
ciertas palabras se convierte en un enemigo mortal para el oído. Por
tanto, aplaudámosle a los norteamericanos que entre enredos han logrado
entendernos “a little” y con esfuerzo se atreven a decirnos: “un gusto
conocer a usted”, “a mí gustar su casa” o “yo querer agua, por favor”.
Al ser considerado uno de los idiomas más importantes en el mundo y
gracias a Miguel de Cervantes – y su novela ‘Don Quijote de la Mancha’ –
cada 23 de abril celebramos en Colombia, España, y otros países, el ‘Día del Idioma’.
Fecha que hemos decidido aprovechar para dar a conocer esas palabras
que por su excesivo uso de “r”, “x”, “ch” y “ñ” son el dolor de cabeza
de los extranjeros al momento de pronunciarlas y utilizarlas en una
oración.
Amuñuñar: Apretar cariñosamente. Encoger el cuerpo. Anatomopatológica: Perteneciente o relativo a la anatomía patológica. Bodrio: Guiso mal aderezado. De mal gusto. Billuyo: Dinero. Bregar: Trabajar afanosamente. Chascarrillo: Anécdota jocosa. Chiste. Cimarrón: Animal doméstico que escapa de sus amos y se asilvestra. Correveidile: Persona que lleva y trae cuentos y chismes. Coscorrón: Golpe en la cabeza que no produce sangre y duele. Despotricar: Hablar sin consideración Esternocleidomastoideo: Músculo robusto situado a los lados del cuello. Execrable: Digno de ser reprobado severamente. Fratricidio: Cuando un hermano mata a otro hermano Férula: Dispositivo
o estructura que se aplica para mantener en su posición o sostener e
inmovilizar partes del cuerpo con fines generalmente terapéuticos. Gañán: Mozo de labranza. Patán.
Güipa: Niño, persona de poca edad.
Inexorable: Implacable. Irrisorio: Que provoca la risa. Jipiar: Hipar, gemir, gimotear. Cantar con voz semejante a un gemido. Mamporrero: Hombre que ayuda en la reproducción de los animales domésticos. Mercachifle: Persona dominada por el mercantilismo. Otorrinolaringologia: Parte de la patología que trata de las enfermedades del oído, nariz y laringe. Plañir: Gemir y/o llorar de forma tal que los otros lo escuchen. Plutócrata: Gobierno de los más pudientes Proparoxítono: Esdrújulo. Roña: Porquería, suciedad fuertemente incrustada en una superficie. Testaferro: Persona que presta su nombre en un contrato que en realidad corresponde a otra persona Ubérrimo: Extremadamente fertil. Uxoricidio: Delito que comete el que mata a su mujer. Zafarrancho: Limpieza general. Definitivamente "este idioma no se entiende ni al derecho ni al revés..." NOTA: El
siguiente video, así como los dos anteriores que publicamos en esta
nota son propiedad de www.theflama.com, nos presenta las divertidas
conclusiones de los norteamericanos al ver imágenes de reconocidos
personajes latinoamericanos. Celia Cruz es confundida con un
hombre, un Oompa Loompa de la ‘Charlie y la Fábrica de Chocolates” y una
versión mexicana de los Teletubbies; Cristina Fernández de Kirchner
(Presidenta de Argentina) es ante los ojos de los “gringos” una actriz
de reality y aunque la imagen del Che Guevara resultó ser conocida por
todos, ninguno de los encuestados fue capaz de decir su nombre.