viernes, 11 de enero de 2013

Literatura desde la viñeta

Una biografía de Gabriel García Márquez en cómic es el más reciente producto de una editorial que le apuesta a la novela gráfica


“Nuestro negocio es de contratendencia”. No es un manifiesto, aunque podría serlo./elespectador.com
 No contracultural, pero tal vez ligeramente subversivo, el corazón que late detrás de Rey Naranjo Editores es el amor por la palabra y las ideas. Un hecho obvio tratándose de una editorial, dirían algunos. No tanto.
“Lo que quiero hacer son libros”. Entre el momento de la revelación de John Naranjo y la primera impresión pasó poco más de un año. La fascinante historia de las palabras, de Ricardo Soca, fue el primogénito: un libro que hace honor a su título, pero que desde la portada emite un grito en una frecuencia bien diferente. Con un pronunciado énfasis gráfico es mucho más que un tratado, aunque podría aspirar a serlo, sin la somnolencia del término. El sinónimo preciso tampoco sería texto.
El rastro de las migajas, el instante preciso, si se quiere, lleva a una biblioteca en un barrio irlandés de Boston. Películas, libros y cómics, novelas gráficas. Muchas. Suficientes.
Este reencuentro con un formato que nunca llegó a florecer del todo en Colombia, como sí lo hizo en otras latitudes, marcó a Naranjo irrevocablemente.
La novela gráfica es tal vez uno de los formatos más ampliamente explorados hoy en día, uno de los pocos segmentos de la industria editorial que, atado al papel, crece continuamente. El crecimiento no es sólo en cifras manejadas por un departamento de mercadeo, sino en prestigio artístico y literario.
Tal vez sean muy pocas las voces que aún se atreven a cuestionar los méritos y alcances de un formato que, lejos de los premios y las elecciones de dudosos jurados (aunque también hay Pulitzer y Costa Award por ese lado), ha producido algunas de las historias más desafiantes de los últimos tiempos, incluso alejándose de los superhéroes y los villanos eternos. No sólo hay entretenimiento para las mañanas del domingo, sino narrativa en serio.
Pero, más que una consideración de mercadeo, sin dejar de serlo tal vez, el camino que Rey Naranjo Editores ha trazado en tres años es más una amplia trinchera, un lugar para la resistencia: el imperio, del libro, contraataca.
La meta es producir una lectura especial apoyada en la perfección del producto en sus acabados, pero también en lo que propone en términos narrativos, bien sea con texto o con imágenes y, claro, con las dos. El vehículo perfecto, de acuerdo con Naranjo, es el libro.
En tiempos entregados al bit y al electrón, el evangelio del libro continúa esparciéndose, principalmente a través de la novela gráfica y los libros infantiles, dos segmentos que no sólo se venden bien, sino que resultan particularmente complicados de adaptar a soportes digitales. Noticias desde la resistencia: los llamados a continuar con el oficio de imprimir libros podrían no ser las adaptaciones de novelas policíacas suecas, sino productos únicos que, encarnados en un cuerpo físico, entregan una experiencia.
Gabo, memorias de una vida mágica es una novela gráfica basada en la vida de Gabriel García Márquez que en 200 páginas propone una mirada al escritor desde un ángulo diferente: literatura desde la viñeta. El libro, que será presentado en el Hay Festival de Cartagena, es uno de los intentos nacionales por traer a Colombia los buenos vientos que soplan para el cómic en el resto del planeta y que, al menos desde Rey Naranjo, incluyen la publicación de obras como Chico y Rita (novela gráfica de Fernando Trueba y Javier Mariscal), Los hijos de la roca (una crónica de montañismo mezclada con cómic) y La chica de polvo (un relato gráfico de la autora surcoreana Jung Yumi), entre otros.
¿Patadas de ahogado?: no, al menos a juzgar por los números de Rey Naranjo, que en tres años ha logrado subir sus ventas en más del doble con un marcado énfasis en la publicación de novelas gráficas