Variaciones de la frecuentación de la muerte detenida
Las
intermitencias de la muerte
José
Saramago
Sinopsis
En un país
cuyo nombre no será mencionado se produce algo nunca visto desde el principio
del mundo: la muerte decide suspender su trabajo letal, la gente deja de morir.
La euforia colectiva se desata, pero muy pronto dará paso a la desesperación y
al caos.
Sobran los
motivos. Si es cierto que las personas ya no mueren, eso no significa que el
tiempo haya parado. El destino de los humanos será una vejez eterna.
Se buscarán
maneras de forzar a la muerte a matar aunque no lo quiera, se corromperán las
conciencias en los “acuerdos de caballeros” explícitos o tácitos entre el poder
político, las mafias y las familias; los ancianos serán detestados por haberse
convertido en estorbos irremovibles. Hasta el día en que la muerte decide
volver…
Arrancando
una vez más de una proposición contraria a la evidencia de los hechos
corrientes, el Premio Nobel de Literatura José Saramago, desarrolla una
narrativa de gran fecundidad literaria, social y filosófica que sitúa en el
centro la perplejidad del hombre ante la impostergable finitud de la
existencia.
José Saramago (Azinhaga, 1922 - Tías, España, 2010)
Narrador y ensayista portugués, premio Nobel de Literatura en 1998. Nacido en
el seno de una familia de labradores y artesanos, José Saramago creció en un
barrio popular de Lisboa. Su madre, analfabeta, inculcó en él la sed de saber y
le regaló su primer libro. A los quince años abandonó los estudios por falta de
medios y tuvo que ponerse a trabajar de cerrajero. Luego se desempeñó en una
caja de pensiones y más tarde se dedicó al periodismo, la labor editorial y la
traducción. Colaborador de diversos periódicos y revistas, entre ellos Seara
Nova, fue también codirector del Diario de Noticias en 1975. Se adhirió al
Partido Comunista Portugués, por lo que sufrió censura y persecución durante la
dictadura de Salazar. En 1974 se sumó a la Revolución de los Claveles. La obra
de José Saramago se caracterizó por interrogar la historia de su país y las
motivaciones humanas. Encontrar las claves por las que un imperio quedó
relegado a un segundo plano respecto al resto de Europa y entender el accionar
del hombre fueron sus preocupaciones centrales. Pero aunque su novelística
tiene como eje vertebrador la realidad de Portugal y su historia, no se trata,
sin embargo, de una narrativa histórica, sino de relatos donde la historia se
mezcla con la ficción y con lo que podría haber sido, siempre a través de la
ironía y al servicio de una aguda conciencia social. Se dio a conocer en 1947
con Tierra de pecado, novela de corte realista que no suele incluir en
su bibliografía. Después de un largo período de silencio, en 1966 publicó Los
poemas posibles y en 1970 Probablemente alegría, colecciones de
poesías en las que, tratando con fina ironía sobre todo los temas del amor y
del erotismo, renovó con vigor el lenguaje poético tradicional. Autor de libros de crónicas, de obras
teatrales, del volumen Viaje a Portugal (1981), lo más importante y
fecundo de su producción literaria se inicia con El año 1993. (1975). Saramago
se consolidó sobre todo como narrador de gran rigor estilístico con la novela Manual
de pintura y caligrafia (1976), con los cuentos del volumen Casi un
objeto (1978) y con sus últimas novelas. En Alzado del Suelo (1980)
se reveló como un gran escritor. Es una narración histórica cuyo escenario es
el Alentejo, entre 1910 y 1979, y en la que el lenguaje campesino, el humor y
el sarcasmo se conjugan para hablar de la realidad. Con una prosa poética y una
técnica narrativa propia de la tradición oral, trazó un gran fresco de la
sociedad alentejana y dio muestras de haber alcanzado la madurez estilística
superando la tradición neorrealista de la novela rural. En Memorial del convento (1981),
contando la historia del convento de Mafra, reconstruyó, gracias a un serio
estudio de los documentos, a una hábil dosificación de perspectivas y a una
sabia caracterización de los personajes y del lenguaje, un período histórico
cuyo conocimiento resulta necesario con miras a superar la crisis de identidad
que aflige al portugués de hoy. Su actitud crítica siempre se hace presente, y
así como celebra la belleza de su tierra también señala el espanto ante un
pueblo "sediento de martirio", que asistía a los autos de fe y a las
corridas de toros en el siglo XVIII, o que se alistaba voluntariamente en las
milicias del gobierno de facto en la década del treinta. Sus novelas El año
de la muerte de Ricardo Reis (1984) y La balsa de piedra (1986)
confirmaron sus grandes dotes de narrador. En la primera, Saramago convierte en
protagonista de su novela a Ricardo Reis, uno de los heterónimos que empleó en
su obra el poeta Fernando Pessoa. Vivo sólo en la imaginación de su creador,
Reis no alcanza a experimentar las emociones propias de un ser viviente. Llega
a Lisboa en 1935, pocos días después del fallecimiento de Pessoa, y se dedica a
recorrer la ciudad y a frecuentar a sus gentes. Dos mujeres, la sencilla Lidia
y la vulnerable Marcenda, conducirán a Reis hasta el límite de sus
posibilidades: al final, prevalecerá su incapacidad para amar. Unas fantásticas
conversaciones con su creador, Pessoa, a quien se permite regresar brevemente
al mundo de los vivos, acabarán por convencerle de su condición de criatura de
ficción. Su obra de los últimos años incluye novelas, diarios y otras publicaciones,
conjunto entre el que deben citarse Historia del cerco de Lisboa (1989),
Todos los nombres (1997) y la obra teatral In nomine Dei (1993).
En El Evangelio según Jesucristo (1991) se deja ver el humanismo de
Saramago, enfrentado a cualquier planteamiento dogmático y que resuena siempre
detrás del escepticismo que caracteriza en gran medida su punto de vista. En Ensayo
sobre la ceguera (1995), advirtió sobre "la responsabilidad de tener
ojos cuando otros los perdieron" y, escéptico pero solidario, se
preguntaba si había lugar para la esperanza tras el nuevo milenarismo que la
humanidad estaba viviendo. Cuadernos de Lanzarote (1997) es un libro
curioso en el que, a manera de diario, cuenta la vida cotidiana y reflexiona
sobre el ser humano, el espacio y el tiempo. La Fundación José Saramago anunció
en octubre de 2011 la publicación de una novela inédita, Claraboya,
escrita a principios de los años cincuenta. Tras esta novela no publicada,
Saramago "mantuvo un silencio creativo de dos décadas".
Fuentes.
Texto: bibliocomunidad.com. Semblanza biográfica y foto autor:
biografiasyvidas.com