Los escritores que hoy me ocupan somos todos hijos de un país fértil y hermoso, de geografía, acentos y costumbres tan variadas que nunca deja de sorprendernos cuando nos aventuramos a salir de nuestra región nativa a visitar los múltiples y variopintos senderos de Colombia. Pero en medio de toda esa maravillosa diversidad nos une una historia y unas tradiciones compartidas
La diáspora de escritores colombianos en la fabulosa capital del mundo/delcastilloencantado.blogspot.com |
Cuando decidimos irnos y abandonarlo
todo, siempre nos llevamos ese manantial memorioso de nuestros años
formativos. Y al radicarnos en esta Nueva York maravillosa, demencial,
atosigante, bulliciosa, aislante, torrencial y apasionante, descubrimos
que aquí, mejor que en ninguna otra parte del mundo, podemos conocer la
rica savia que nos alimenta en la disimilitud. Es precisamente en Nueva
York en donde confluyen todas las vertientes de nuestra colombianidad
para redescubrirnos en la diferencia. No importan cuán disímiles sean
nuestros acentos, nuestros platos y costumbres regionales, aquí
aprendemos a convivir y a compartir con el mismo regocijo de la
infancia.
El grupo de escritores colombianos que
viven en Nueva York está alimentado por esa absoluta y alucinante
diversidad de nuestra tierra. Estoy seguro que ellos mejor que yo pueden
explicar la razón de su partida. Aunque soy amigo de la mayoría de
ellos, todo lo que yo diga sería especulación pues lo veo desde el
exterior.
Jaime Manrique y Silvio Martínez
abandonaron el país en la adolescencia y terminaron el bachillerato en
los Estados Unidos. Algunos han vivido más de veinte años en este país
como es mi caso particular y el de Manrique, Martínez, Alonso Mejía y el
Dr. Vicente Trezza. Cinco lustros más o menos han vivido en Nueva York
los escritores Gabriel Jaime Caro y Berty Barranco y Eduardo Márceles
Daconte. Y otros llegaron en 1990 como James Cañón y Ricardo León
Peña-Villa. El resto son los que se afincaron en años más recientes,
entre ellos Don Gellver De Currea-Lugo, Plinio Garrido y Ben Hur
Carmona.
Hay dramaturgos como Carmona,
Martínez-Palau, De Currea y yo; son narradores James Cañón, Jaime
Manrique, Silvio Martínez, el Dr. Trezza, Eduardo Márceles, Plinio
Garrido y yo; y mis colegas poetas son Alonso Mejía, Gabriel Jaime Caro,
Berty Barranco, Peña-Villa, Manrique y Don Gellver. Eduardo Márceles es
también ensayista y periodista además de narrador. Berty Barranco,
Jaime Manrique, Márceles Daconte, Ricardo Peña y Ben Hur Carmona viven
en Manhattan y el resto vivimos en Queens. Márceles, Garrido, Barranco,
Manrique, Trezza y yo somos oriundos de la costa norte, mientras que
Caro, Carmona y Peña son antioqueños, James Cañón es del Tolima, Alonso
Mejía es caldense, Silvio Martínez es valluno y De Currea es de Bogotá.
Y si se insiste, se podría agruparnos en
generaciones arbitrarias que vayan de los nacidos en los treinta y
cuarenta como el Dr. Trezza, Márceles Daconte y Alonso Mejía, los de
finales del cuarenta hasta mediados de los cincuenta, como es el caso
mío y el de Garrido, Caro, Manrique y Martínez-Palau, mientras que el
grupo de aquellos nacidos a finales de los cincuenta hasta finales de
los sesenta incluiría a Barranco, De Currea, Peña-Villa y Cañón.
Como puede observarse, el grupo de
escritores colombianos que nos ocupa es tan proteico e insujetable como
una gota de mercurio en un arroyuelo cristalino. El profesor Jonathan
Titler alguna vez trató de reducirlos al esquema de una literatura
neo-colombiana por el hecho de ser escrita en Nueva York y por las
influencias idiomáticas que esto conlleva. Debido a que las teorías
literarias me aburren o me exasperan, sencillamente diré que ante todo
somos escritores, que escribimos en español o inglés y que tenemos un
pasado histórico común que indefectiblemente nos une a esa patria
atomizada, violenta, bella, memorable, nostálgica y terrible que es la
Colombia de ayer y de hoy, solidificada en el transcurrir de nuestros
recuerdos escritos y tergiversada por nuestra labor de escritores.
Recordar no es vivir. Más bien es destruir y reconstruir para comprender
nuestro pasado y entendernos mejor.
Berty Barranco nació en Barranquilla en
1.959, se radicó en Nueva York en 1.986 y ese mismo año obtuvo una
mención honorífica en el concurso de poesía de la Casa Cultural
Dominicana de Nueva York. Una década después, el Consejo Cultural
Colombiano (COLCUC) publicó su primer poemario bilingüe Presagio/Omen. En un poema, "Oda a la casa de las delicias", nos trasporta a la Barranquilla de su infancia:
De noche retorno a la casa
donde la niñez tenía
cincuenta anturios,
un cocodrilo tejiendo
la nostalgia del río,
un turpial en huelga
por la ausencia de mi madre,
dos perros consumiendo un matrimonio de antaño,
cinco lagartijas jugando a la lleva
y veinte gusanos de tierra.
James Cañón nació en 1968 en Ibagué y escribe narrativa en inglés. Cuentos suyos aparecieron antologados en Bésame mucho (Nueva York: Painted Leaf Press, 1999) yVirgin, Guerrillas and Locas (San
Francisco: Cleis Press, 1994). Actualmente cursa la maestría en
creación literaria en Columbia University y trabaja en una novela sobre
un pueblo del Tolima donde todos los hombres han sido asesinados o
capturados por la guerrilla. Su título provisional es el Pueblo de la viudas. Cito el primer párrafo del cuento "The Two Miracles of the Gringos' Virgin" que apareció en Bésame mucho:
My grandmother never goes to bed without drinking a shot of aguardiente and
saying her prayers to a small replica of the Statue of Liberty. I've
told her many times that it isn't a virgin, just symbol of freedom, but
she is stubborn, and a little crazy, too. She insists that the Statue of
Liberty is la virgen de los gringos; and that one of these days
the gringos' virgin is going to work her two miracles: making my penis
disappear and reuniting me with my mother.
Al final de la primera escena de The Devil Is an Ass, el medellinense Ben Hur Carmona pone en boca de Nelson, uno de los personajes de la pieza, lo siguiente:
It was like a great dirty tongue
licking. She wanted to be clean. So, flesh warmed flesh, then heated. I
tasted, she savored. There were degrees to intimacy. You better know.
This was a primitive feeling. Again, her lips coursed down now, a low
smoldering fire. Suddenly, like the flash hit of a tree struck by
lightning, she arched against me and I was lost...We bombed, we bombed,
we bombed. We. The bed had been turned down. Yes, yes. And the phone
began to ring, she had talent, she had skills, and the phone rings
mostly pleasant, yes. We looked at each other right in the eye. This is
the last... Well it wasn't meant to be. I was probably channeling.
"Uh-uh," she said or anything. "Kiss me" and she would go out of her
mind but... It was over now.
Gabriel Jaime Caro nació en Medellín en 1.950 y reside en Nueva York desde 1.982 donde publica su primer poemario, 21 poemas en 1.983. Luego funda en 1.984 la revista de poesía Realidad aparte y se desempeñó como director hasta este año. En 1.990 publica una antología personal titulada El libro de los seres inútiles. El eco de este ardid es su poemario más reciente. De este último, cito el poema "Abismo de Lila":
Es fácil detenerse en el Lower East Side,
y más concretamente en Loisaida, la oveja negra
de Manhattan, en donde han muerto tantos amigos
a causa del desenfreno, de vivir la Sodoma con libertad,
mejor dicho, olvidándose de todos y de sí mismos.
Todos llegan por el desarraigo
a la búsqueda de un ser sobrenatural
(Deus ex machina), que bendiga su nomadismo.
Desde allí se ven los rascacielos detestables, orgullo del diseño
y de la fotografía.
...Y si me quito los lentes, estoy en otro lugar.
Sólo también mueve el rateo, la muchedumbre
del cuarto escénico.
A Ricardo León Peña
Don Gellver De Currea Lugo nació en
1.960 en Bogotá y vive en Nueva York desde hace cinco años. En 1.997,
ocupó el segundo lugar en el primer concurso Poeta en Nueva York
patrocinado por la revista literaria La Ñ con su libro Alguien cerca de usted acaba de no suicidarse. Algunos de sus poemas se encuentran en la antología Not black and white (1.996) y su pieza en un acto "Spleeping Bag" fue publicada por Ollantay Theater Magazine en el mismo año. De su libro galardonado cito:
Bienaventurados
quienes vemos el mundo
al revés
De nosotros es
el reino de los espejos
Teoría Alternativa
Desteñir
el arco iris
para colorear
la primavera
Teoría de la felicidad
Por el orificio de la manguera rota
algunas gotas
logran su libertad
Tregua sin diálogo
Quiero morir
un poco
tanto que al resucitar
no exista
ni la vida
ni la muerte
ni yo.
Yo nací en Barranquilla en 1.948 y vivo en Nueva York desde 1.976. Mis poemarios son: Reflejos de una máscara (1.986), Proemas en cámara ardiente (1.989), Habitación en la palabra (1.994), Palimpsestos, Doble corona y Usurpaciones y deicidios (1.997). Piezas de teatro: "Castillos de arena", "Allá en el club hay un runrún", Move Meets Metes Move: A Tragic Farce, La pasión y "Una angustia se abre paso entre los huesos". Libro de narrativa corta: Triacas. De Proemas. . . cito "Retorno al sabor":
Retorno al sabor
Los manuscritos rotos, el marco
fraccionado cuestionando la verdad de la mentira, el sabor a
fresón-con-nata de lo que desdice el decir contorneado de la fresa que
saborea la mentira de un batido que reniega el contorno del sabor, que
no lo dice y, sin embargo, explica "La cien" que contradice a Bobby y a
Ricardo ― el sabor, las enmiendas de los años sesenta ― la emasculación
de los decires, de las campanas tocando a tocsin.
No hay que cuestionar el crecimiento de
los vellos desenfrenados, absurdos. ¿Acaso? Tal vez habría que regresar
a Colombia y desmentir doce años de ausencia: "Pregúntales a todos si
se enteraron". El rey y la cruz resucitando del pasado adormecido. Es
menester que decidamos.
Plinio Garrido nació en Sincé, Sucre en 1.948 y se crió en Barranquilla. Es narrador, dirige un semanario, La palabra, en Queens y colabora con publicaciones de Latinoamérica y los Estados Unidos. Ha publicado Confieso que estoy vivo y Neoironías(narrativa corta) y recientemente la novela La reina. Sus trabajos han aparecido en varias antologías en Colombia y los Estados Unidos. De Confieso que estoy vivo, cito el primer párrafo de "Chernobil a mis pies... cruzando Madison Avenue".
El herraje estructural que enraizaba el
bosque de edificios en Madison Avenue ha sido diluido. La onda horadante
— mas no la flama del hongo incandescente — ha accedido el último
instante en la conciencia de policías y de ladrones adentro y afuera del
rascacielos públicos y privados, del siciliano que aspiraba a vivir
¡gratis! en la mansión Grace, del ganador pletórico de gozo y del
maldiciente perdedor en Wall Street, de la niña y del viejuco recreando
la suave experiencia entre la nieta y el abuelo en Roosevelt Island, de
la princesa que sonríe feliz en la revista Vogue y que vino a copular con el valet de parlacréole de su hotel-guarida en el Village, de los jovenzuelos que empezaban a descubrir el amor en un parque de Little Neck.
Jaime Manrique Ardila nació en
Barranquilla en 1.949 y vive en los Estados Unidos desde 1.965. Obtuvo
el primer premio en el concurso de poesía Eduardo Cote Lamus en 1.975
con Los adoradores de la luna. En 1.978 el Instituto Colombiano de Cultura publica El cadáver de papá,
una colección de narrativa corta, una noveleta que da título al libro y
traducciones al español de poetas estadounidenses del siglo XX. En
1.983 Clarkson &; Potter publica en inglés una versión corregida y
aumentada del Cadáver titulada Colombian Gold. Otras novelas: Latin Moon in Manhattan (St. Martin Press, 1992) yTwilight at the Equator (Faber & Faber, 1997). Mi noche con/My Night With Federico García Lorca (poemas, 1997), Eminent Maricones (memorias, 1999) y Mi cuerpo y otros poemas(Bogotá: Casa Silva, 1999) son sus libros más recientes. Acaba de obtener la beca Guggenheim de narrativa. De Mi cuerpo y otros poemas, cito "Mi cuerpo":
Mi cuerpo
que con mis ojos
abiertos es mi cuerpo
mi cuerpo que con mis ojos
cerrados es perfecto.
Mi cuerpo que cuando lo miran
tus ojos es tu cuerpo.
Mi cuerpo que sólo debió haber
conocido tu cuerpo
que sólo debió haber amado tu cuerpo.
Mi cuerpo que malgasté
en tantos otros cuerpos.
Mi cuerpo sagrado, mi cuerpo
maltratado, mi cuerpo desgastado
y deshecho. Alabado sea el creador
de todos los cuerpos, de mi alabado,
aventurado, dichoso cuerpo.
Mi cuerpo que sólo existe
para tu cuerpo
que ya no es mío
pues ahora es tu cuerpo.
Toma mi cuerpo, te regalo mi cuerpo
bendice con el calor de tus manos mi cuerpo.
Penetra mi cuerpo
devora mi cuerpo
este cuerpo desdichado,
solitario y sediento
mi cuerpo aúlla por tu cuerpo
cuerpo sagrado cuerpo de estiércol
cuerpo que sufrió ser mi cuerpo
cuerpo que gozó
tantos cuerpos ahora yertos
tanta tristeza de tantos cuerpos
tantas horas de recuerdos
me ha regalado mi cuerpo
tantas delicias que me proporcionaron
miles de cuerpos
ese regalo sagrado que nos hace sólo el cuerpo.
Este poema es un regalo
de tu cuerpo y mi cuerpo.
Eduardo Márceles Daconte nació en
Aracataca (Magdalena) en 1.942, se crió en Barranquilla y vive en Nueva
York desde 1.989. Su libro de narrativa corta Los perros de Benarés y otros relatos peregrinos fue publicado por la Oveja Negra en 1.985 en Bogotá. Obtuvo el primer premio de narrativa erótica en el concurso de la revista Plexus de Barranquilla en 1.999. Es subdirector de El Puente Latino y
ha publicado varios libros de ensayos. Antólogo de los narradores y
poetas colombianos de los Estados Unidos de la serie publicada por el
Ministerio de Cultura de Colombia. Recientemente obtuvo la beca para
investigación cultural del Observatorio del Caribe para finalizar un
libro sobre la pictórica costeña colombiana. De la antología que realizó
para Brújula/Compass sobre los escritores colombianos en los EE.UU. en el invierno de 1.999 tomo un párrafo de su cuento "La mujer de Broadway":
Camino de prisa hacia el metro con una
sensación de angustia y miedo. Las manos están húmedas con un sudor frío
y cuando penetro en la penumbra de la estación, me siento un tanto
reconfortado por mi decisión. No me arrepiento de haber rechazado la
oferta, aunque una sonrisa interior me dice que, con tantas estrecheces
económicas, esos dos mil dólares hubieran sido utilizados para
sostenerme mientras termino la novela que se encuentra detenida entre
dos estaciones.
Silvio Martínez-Palau nació en
Buenaventura en 1.954, se crió en Cali y vive en los Estados Unidos
desde 1.968. Su libro de narrativa corta Made in USA: Estudio de naturalezas muertas fue publicado por Publicaciones del Norte de New Hampshire en 1.986. Su pieza teatral The English-Only Restaurant fue
montada por el Teatro Rodante Puertorriqueño en 1.990. Actualmente
escribe varios guiones cinematográficos y televisivos. De The English-Only Restaurant:
Second Act, Scene 2
Enters JOHNNY GARCÍA. He is the
stereotype of the Hispanic pimp: White suit, jeweled hands, mustache,
fedora hat. He is dripping water from the rain. He stands at the
threshold then dashes to a stool at the bar.
HENRY: (when he finally catches up with him, sighing) Good afternoon, gentleman, welcome to English Only.
JOHNNY: (turning to look at Henry, amused at Henry's thick accent and solemn demeanor) Tráete un café. ¿Tienes Ron Caña? Dame uno también. (While Henry goes away with the order, after saying "excuse me," JOHNNY goes to the public pone to make a call)
Yo'. It's me. How things? … ¡Coño! I told you: that guy don't know what
he's doing. Pero mira: that's the best thing that could've happened. Lo
mejor. ¿Qué dijo María? Ha, ha, ha! Oye, yo voy pa'llá en un momento.
Oh, and tell that guy not to forget it's Thursday at six. I don't wanna
hear of any mixed ups again…I'll be there later. (He hangs up)
MR. MARTÍNEZ: (advised by HENRY of JOHNNY's Spanish speaking. When JOHNNY has sat back at the bar)
Good afternoon, sir. Let me introduce myself: my name is Tony Martinezz
and this is my restaurant, English Only. Let me first congratulate you
on your impeccable American accent; it is delicious to hear Hispanics
talking English so well. But, tell me if I'm wrong: it is my impression
that I have not the pleasure of looking at you here in my respectful
restaurant before…
JOHNNY GARCÍA: Say what? Look, jerk: I
am trying to have a moment with myself! What are you talking about,
American accent? I already ordered something, don't bug me now. (Looking straight at MARTINEZZ's startled face) Just beat it, huh? (MR.MARTINEZZ beats it and JOHNNY quietly beings nursing the coffee HENRY has just brought) I don't believe it! What's that sucker talking about, American accent! (He hisses)
Alonso Mejía nació en Neira (Caldas) en 1.943 y reside en Nueva York desde 1.970. Su poemario Armadura de silencio fue publicado en 1.990 por la Editorial Moira. Co-director de la revista de poesía Realidad aparte en su segunda vida (1.993-2.000). De su poemario cito lo siguiente:
El mundo desaparecido:
entre el camino que adiviné
hasta ahora el caos que es
como un destino vi destellos del mar
prendidos de los árboles
fugas de arrebatos caminando al sol
locomotoras girando en torno del poeta.
Hoy en tus rondas de pájaro invernal
que contempla el alba cálida
con la desconfianza de un muro
en medio del desierto
presenciarás un orden atávico
que habrás de confundir con mis visiones.
Pobre de mí por no decir pobre de ti.
Ricardo León Peña-Villa nació en
Medellín en 1.962 y está radicado en Nueva York desde 1.990. Ha
publicado los siguientes poemarios: La poesía como recurso a la soledad en Nueva York (1.992), Edge of Twilight (1.993), Tigre de Aries (1.993) y Treintaitrés. Se desempeña como periodista cultural para el diario/LA PRENSA de
Nueva York. La Asociación de periódicos en español le acaba de otorgar
una mención en la categoría de "Mejor crónica de éxito". De Treintaitrés tomo "Alumno avezado":
El hombre hizo un gesto
no modula palabra
mientras el aire
forma la historia.
Marceau orgulloso
exhibe sus dientes
blancos de mimo,
para aplaudir a su alumno.
El médico pediatra Vicente Trezza nació en Barranquilla en 1.932 y es autor deExaltación (poesía), La misma tierra (narrativa, 1.979) y Bajo el poder de Poncio Pilato(novela, 1.993). De esta última cito el párrafo siguiente:
Una terrible pestilencia apareció
después que la descomposición y la podredumbre cubrió toda la comarca
destruida por la erupción volcánica. El Emperador Tito, que reinaba
entonces, como siempre bueno, solícito y bondadoso, se apresuró a ayudar
personalmente a las víctimas del sismo. Y en una de sus salidas a los
campos insalubres contrajo el miasma de la peste y, a los pocos días,
murió calcinado por la fiebre, en los idus de septiembre y a los
cuarenta y un años de edad, en la misma casa de campo de Reate, en el
país de los sabinos, donde había muerto su padre, el Emperador
Vespasiano.
De esto modo, pues, termina mi recorrido
panorámico por la literatura de colombianos radicados en Nueva York. De
la Barranquilla de los años sesenta a la Roma de hace dos mil años, los
intereses y estilos de esta diáspora son tan inclasificables como los
destinos desconocidos que nos aguardan a cada uno de nosotros. Los
senderos infinitamente bifurcables de nuestras alternativas y obras
producidas sólo serán definitivas con el sello que les brinde la muerte,
nuestra eterna amante y compañera. Mientras llega, que la labor de
todos sea fructífera y duradera.
© 2000, 2014 Miguel Falquez-Certain