sábado, 6 de abril de 2013

Escritor recorrerá el mundo para seguir primeros pasos del hombre

Paul Salopek comenzó una correría que le tomará siete años y lo llevará hasta Tierra de Fuego

Paul Salopek, periodista, escritor y ganador de dos premios Pulitzer/eltiempo.com
Si todo se cumple como lo ha consignado en su riguroso plan, Paul Salopek, caminara 36 mil kilómetros desde el medio del África hasta el extremo sur de América, siguiendo la ruta que probablemente recorrieron los primeros seres humanos que poblaron la tierra, hace unos 60 mil años.
No se trata propiamente de un paseo de uno de los tantos viajeros que recorren el mundo, sin agenda concreta. El plan que elaboró Paul, durante dos años, tiene por el contrario los más ambiciosos objetivos desde el punto de vista histórico, cultural, educativo y científico. Se trata nada menos que de repasar los caminos que siguieron los primeros migrantes humanos del planeta, y conocer sus entornos de vida hoy, después de haber transcurrido una civilización que registra ya más de 2.500 generaciones.
En su reciente charla en la Universidad de Harvard, Salopek, nacido en California y criado en México, periodista y escritor, ganador de dos premios Pulitzer, dejó claro que no se trata de un ‘reality show’ ni él es el personaje central, de este recuento de la historia; se trata de recrear dos extremos: la oscuridad que caracterizó las primeras épocas del ‘homo sapiens’ y la realidad del hombre actual dotado de modernas tecnologías.
En ese sentido, Salopek rastreará y documentará aspectos que han marcado para siempre la vida del ser humano como el manejo del medio ambiente, el desarrollo del lenguaje, la agricultura, el comercio, la supervivencia y la creatividad que ha tenido a través del tiempo, como haber fabricado su propio calzado.
Por eso es que su recorrido está perfectamente trazado, gracias al apoyo de científicos en distintas materias y de organizaciones como National Geographic.
Por ejemplo, su primer trayecto lo llevará por el Valle del Rift, en donde crecieron los humanos anatómicamente modernos; se cruzará con algunos de los caminos que emprendió el famoso viajero islamita Ibn Battuta, por allá en el sigloXIII; bordeará la costa del Mar Rojo para llegar a Oriente Próximo, siguiendo las huellas del profeta Abraham y centro de la más prolongada guerra religiosa entre el islam, el judaísmo y cristianismo. De allí pasará a Irak donde visitará la tumba del anciano de Shanidar, símbolo de la compasión que abriga la humanidad, desde los viejos tiempos.
Como antecedente del punto de partida del comercio global, Salopek transitará tramos de la famosa Ruta de la Seda, que conectó siglos atrás el tráfico de mercancías entre el lejano oriente y Europa. Más tarde hará una parada obligada en China, donde – según sus investigaciones previas- el hombre creó sus primeras prendas de calzar, además de ser ese territorio un depósito de más de 200 lenguas y dialectos.
Luego avanzará hasta las gélidas tierras de Siberia, donde se enterará de primera mano sobre las sorprendentes investigaciones que lleva a cabo el científico ruso Sergei Zimov, sobre lo que pudo haber sido la “Edad de Hielo”, que precedió el estado actual del planeta.
Desde allí, se aproximará hasta el famoso estrecho de Bering y saltará a Alaska, en territorio estadounidense. Fue precisamente por allí, por donde se dice que llegaron los primeros pobladores de América, antes que se rompiera el puente que unió los dos continentes hasta hace unos 4 mil años.
En su paso por Norteamérica, Paul visitará el hueco que dejó hace siglos un meteorito que se estrelló entre las Montañas Rocosas, y luego visitará en Oklahoma, el Valle de Shenandoah, donde la tierra fue arrasada por la colonización del Oeste, dejando –entre otras víctimas, a 25 millones de bisontes sacrificados por sus pieles.
Salopek, quien tiene entre sus antecedentes haber atravesado México en mula, en un recorrido de más de 2.000 kilómetros, aspira llegar hasta Tierra de Fuego, en Argentina, al final de esta década.
Habrá caminado, más de 30 millones de pasos, y asegura que irá a pie. Solo tomará algún vehículo en trayectos donde sea estrictamente necesario.
Tal como lo tiene cronometrado, caminará un promedio de 30 kilómetros por día. Lo hará solo durante el primer semestre de cada año, pues el segundo lo dedicará a escribir y preparar materiales. En su recorrido, que inició hace ya dos meses largos en Etiopía, dejará marcado un hito, cada 160 kilómetros.
Como un nómada, de la época post industrial, Salopek ha bautizado su largo viaje como “Afuera del Paraíso” y ha dispuesto de todas las herramientas modernas, para que pueda ser seguido y acompañado por Internet, a través de su sitio http://www.outofedenwalk.com/.
Para el efecto, el camello que lo acompaña en el trayecto del desierto de Djbouit, camino a la costa del Mar Rojo, lleva una manta fabricada con celdas fotovoltaicas que le proveerá de la energía solar que requiere su computador y teléfono satelital, a través de los cuales hará reportes periódicos sobre los hallazgos y misterios de su larga travesía.