martes, 23 de julio de 2013

El nuevo Perú literario se lanza a la conquista de Cartagena, España

Fernando Iwasaki, Jorge Benavides y otros 10 escritores peruanos se reúnen en La Mar de Letras. Las tertulias y actividades literarias se prolongarán  hasta el domingo 28 de julio. La literatura peruana está experimentando un gran crecimiento creativo y editorial

Santiago Roncagliolo, uno de los 12 autores peruanos presentes en Cartagena dentro del certamen La Mar de Letras. / Samuel Sánchez,/elpais.com
 
Perú hierve de palabras. Esa es la impresión que deja el conversar con autores como Santiago Roncagliolo, Jorge Benavides y Fietta Jarque, tres de los 12 literatos peruanos que a partir de hoy participan en La Mar de Letras, uno de los múltiples brazos artísticos del festival La Mar de Músicas que se celebra en Cartagena del 19 al 27 de julio con el país andino como protagonista.
"La clase media es la que está facilitando esta efervescencia, porque el arte siempre ha sido de ella", afirma Santiago Roncagliolo, convencido de que el despegue económico va paralelo al artístico en el país latinoamericano. "Hay muchas nuevas voces y eso enriquece el discurso", remata el escritor de Abril Rojo, premio Alfaguara 2006. Para Fietta Jarque —autora de la novela Yo me perdono (1998, Alfaguara) y una de las tres literatas de Perú presentes en el certamen— destacan literatos como Johann Page (Lima, 1979) y su antología Los puertos extremos (Estruendo Mudo, 2008), Diego Trelles Paz (Lima, 1977) y la novela Bioy (Destino, 2012), el escritor peruano de ascendencia nipona Carlos Yushimito (Lima, 1977) y la dramaturga Mariana de Althaus (Lima, 1974), a quien define como una creadora “muy sensible” y de la que exalta su obra Dramas de familia (2013, Alfaguara). Pero tan importante como esta renovación en las voces es, en opinión de Jarque, la emergencia de un sector editorial cada vez más populoso y entusiasta.
A pesar de centrarse en la actualidad de la literatura peruana, La Mar de Letras también ofrece una mirada retrospectiva a través de diversas actividades. Una de ellas recupera la obra del Nobel Mario Vargas Llosa de manera peculiar. “Hemos impreso, en tinta y en braille, siete fragmentos de sus libros”, indica Lola Fernández, responsable de organizar el evento. “En blanco sobre blanco, de manera que los videntes experimenten las palabras de Vargas Llosa con el tacto”. La ciudad y los perros, El sueño del celta y su discurso de recogida del Nobel, Elogio de la lectura y la ficción, son algunos de los textos elegidos para esta experiencia sinestésica, titulada Vargas Llosa a la mano, que el certamen ha organizado en colaboración con la ONCE. La muestra podrá visitarse hasta el 31 de agosto.
Vargas Llosa y su generación, la del boom latinoamericano, siguen siendo objeto de debate entre los nuevos autores peruanos. Jorge Benavides considera que la generación actual “no siente el mismo compromiso” y que por eso es muy difícil que se dé una tendencia general con unas líneas temáticas y estéticas compartidas. Roncagliolo, que define al escritor de La casa verde como “el último gran intelectual del siglo XX”, considera que la imposibilidad de ser un Vargas Llosa en el segundo milenio tiene sus efectos beneficiosos. “Somos una generación mucho más escéptica y también tenemos una mayor humildad. Además, hoy no se puede ser un Vargas Llosa. Ni siquiera hay un mundo que lo permita”.
Texto en braille de La ciudad de los perros, uno de los siete fragmentos expuestos en Vargas Llosa a la mano. / La mar de músicas
A partir de hoy y hasta el viernes, La Mar de Letras ofrecerá una serie de tertulias con estos 12 escritores. Los escenarios principales serán dos: el teatro romano de Cartagena, con aforo para unas cien personas, y el edificio CIM de la facultad de empresariales. Entre las tertulias y recitales poéticos, destacará el taller de microrrelato impartido por Fernando Iwasaki programado para el próximo miércoles a las 11.00 en la terraza del Palacio de congresos Batel. “Será una oportunidad para reconocer nuestra diversidad y para conocernos un poco mejor”, aclara Fietta Jarque.