El territorio de la Novela: La imaginación
La lectora, de Federico Faruffini./elpais.com |
409 años después de que Miguel de Cervantes publicara El ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha
e inaugurara así una nueva era de la literatura y la novela, este
género no ha parado de conquistar lectores. El siglo XIX fue esencial
para su desarrollo y popularización, además de sentar las bases de ese
artefacto literario que se reinventa de manera constante. Mientras el
siglo XX cimenta y diversifica su popularización entre escritores y
lectores y la reafirma como género clave para el negocio editorial. Un
siglo que demostró que la novela tiene un ADN que la lleva a
metamorfosearse mientras mchos no han parado de augurar su fin en
diferentes momentos.
Así es que hoy, cuando empieza en Lima la I Bienal de Novela Mario Vargas Llosa,
con la presencia de una treintena de escritores de América Latina y
España, en unas 15 mesas redondas y coloquios, me gustaría que entre
todos indaguemos en por qué cree que a la gente le sigue seduciendo el
género de la novela.
Es un misterio, lo sé. Y puede haber tantas teorías como lectores de
novelas existen, pero es una manera interesante de escuchar opiniones de
todas partes. Los tres primeros lectores que abren este coloquio
virtual son los tres escritores que optan al premio de la I Bienal: Juan Bonilla por Prohibido entrar sin pantalones (Seix Barral), Rafael Chirbes por En la orilla (Anagrama) y Juan Gabriel Vásquez por Las reputaciones
(Alfaguara). La cita literaria es organizada por la Cátedra Vargas
Llosa, Acción Cultural Española (AC/E), la Universidad de Ingeniería
& Tecnológica de Perú y el Grupo Hochschild.
Bonilla: "Para mí
todos los componentes de esa pregunta son misteriosos: la gente, la
seducción y el género. Llevo dos días tratando de ser capaz de responder
a tu pregunta, pero no encuentro ninguna respuesta medianamente
satisfactoria".
Chirbes: "Creo que hay muchas razones, que van desde
la de vivir otras vidas posibles, que dice Vargas Llosa, hasta la de
intentar entender qué es lo que nos ocurre; la novela es como esos
mecanos en los que lo pequeño nos permite entender lo grande".
Vásquez: "¿Es
eso cierto? Me lo pregunto. Creo que lo que yo entiendo por novela,
este aparato complejísimo que explora nuestra conciencia, nuestra
moralidad y nuestro lugar en el mundo, está cada vez más retirado del
favor de la mayoría. Ahora, si por novela entendemos autoayuda
disfrazada, reproducción dramatizada de la historia conocida, melodrama
para tranquilizar inseguridades o etapa intermedia entre la nada y la
película, entonces sí: sigue seduciendo.