Familiares, amigos y representantes del mundo de la cultura han dado hoy en Barcelona su último adiós al filólogo, medievalista y académico Martín de Riquer, fallecido el pasado día 17 a los 99 años
Familiares y amigos dan su adiós al filólogo y medievalista Martín de Riquer./lainformacion.com |
El funeral en su memoria se ha celebrado este mediodía en el
Tanatorio de Les Corts de Barcelona con la audición de "Veles e vents",
el popular tema del cantautor valenciano Raimon, que versionó el poema homónimo de Ausias March.
En
la ceremonia religiosa, que se ha desarrollado en gran parte en latín,
siguiendo la antigua liturgia que tanto gustaba a Martín de Riquer, el
párroco, amigo del filólogo, ha señalado que el fallecido "nos enseñó
una manera de actuar, fue amable con todos" y además "ha dejado sus
libros y su saber esparcido entre mucha gente".
Su hijo, el
historiador Borja de Riquer, ha cerrado el acto diciendo que su padre
fue un hombre que "disfrutaba con su trabajo y supo además transmitir su
entusiasmo a alumnos y colegas".
En nombre de la familia, Borja
de Riquer ha agradecido "las numerosas muestras de reconocimiento hacia
su obra y de estimación hacia su persona".
"Fue feliz y supo hacer
felices a todos los que le rodeaban; entre ellos, la gran familia que
creó, seis hijos, once nietos y siete biznietos", ha dicho.
El
canto gregoriano que ha sonado en el ecuador de la ceremonia ha evocado
aquellos mundos medievales de tiempos de los trovadores que tanto
frecuentó Riquer en sus investigaciones, pero uno de los momentos más
emotivos se ha producido cuando gran parte de los asistentes han
entonado la canción popular catalana "Virolai".
En el auditorio se
encontraban algunas personas públicas como los concellers de Cultura y
de Economía, Ferran Mascarell y Andreu Mas-Colell, respectivamente; el
conde de Godó, Javier de Godó; el presidente de la Cámara de Comercio de
Barcelona, Miquel Valls; el líder de ICV, Joan Herrera; o los editores
Jaume Vallcorba, Hans Meinke, Eliseu Climent y Pere Vicens.
También han querido acompañarle algunos discípulos y colegas de la
Universidad, como los también académicos Francisco Rico y Pere
Gimferrer, la socióloga Marina Subirats, la catedrática de Ética
Victoria Camps, o la medievalista Victoria Cirlot.
Francisco
Rico, discípulo cervantino de Riquer, guarda un recuerdo de su maestro
como alguien "siempre feliz", que daba lecciones y que "seguramente
nadie vivió, enseñó y trabajó mejor que él".
En declaraciones a la
prensa, Borja de Riquer ha remarcado que su padre "pertenece a una
generación marcada por la Guerra Civil española y que prácticamente se
ha extinguido, pues ya quedan pocas personas vivas de más de 90 años,
intelectuales humanísticos, interdisciplinares y con tanta sabiduría
global como Miquel Batllori o Jaume Vicens".
En el recordatorio,
dos textos ilustran esa cultura global de sabios como Martín de Riquer:
un fragmento de "Los trabajos de Persiles y Segismunda" de Cervantes y
unos versos del poema "Més ellà dels sentits" de Ricard Permanyer.
Borja
ha recordado que su padre le decía no hace mucho: "He llegado a los 99
porque toda mi vida he fumado y no he practicado ningún deporte"; y ha
añadido a continuación que calcula que cada día se fumaba 20 pipas.
Concluida la ceremonia religiosa, Martín de Riquer ha sido enterrado en el panteón familiar del cementerio de Montjuïc.