El libro The Private War of J.D. Salinger sale a la venta el
martes, mientras que tres días después se divulgará un documental
producido por los poderosos hermanos Weinstein y realizado de forma
paralela por uno de los coautores de la obra escrita.
En ambos
casos se ha restringido al máximo el acceso previo al material, por lo
que no falta quien lo considera como un truco de mercadotecnia para
intentar aumentar aún más el halo de misterio en torno a Salinger.
Sin embargo, de forma muy calculada, el autor del filme y coautor del
libro, Shane Salerno, ofreció una entrevista al New York Times
la pasada semana en la que soltó el gran bombazo: el escritor habría
encargado a sus herederos para que publicaran varias obras nuevas, el
menos cinco, entre 2015 y 2020.
Salinger, tras el enorme éxito de
su novela corta, El guardián entre el
centeno publicada en 1951, huyó de la fama y se recluyó en la pequeña
ciudad de Cornish, Nueva Hampshire, donde murió en 2010 a los 91 años
La última obra que publicó fue el relato Hapworth 16, 1924, que apareció en 1965 en la revista New Yorker.
Por
ello, cualquier nueva obra que salga a la luz -más aún si son por lo
menos cinco- puede cambiar la percepción de lectores y críticos sobre la
trascendencia de la obra de un autor idolatrado por sus admiradores
pero con muchos puntos oscuros en torno a su personalidad, como sus
complicadas relaciones con varias adolescentes o su continua
experimentación con religiones.
La posible publicación de nuevas
obras "es altamente plausible", ya que Salinger trabajó prácticamente
todos los días incluso si no publicaba, por lo que "los libros deben de
existir, en alguna forma", señaló a Efe Drew Hubner, un profesor de
Literatura Contemporánea en la Universidad de la Ciudad de Nueva York
(CUNY).
Aún
así, Hubner advierte de que cualquier lectura de las nuevas obras que
puedan salir a la luz deberá verse con muchos matices, ya que Salinger,
quien fue "la voz de una generación" juvenil, incluso a su pesar,
gracias a El guardián entre el
centeno, no tiene ya ese estatus.
Hubner,
quien también considera que habrá que estudiar cualquier obra que se
pueda publicar en función del momento en que fue escrita, percibe en
todo el proceso un poco de negocio, aunque reconoce que actualmente
"todo en la literatura es un negocio".
Salerno asegura que dos
fuentes independientes del "círculo íntimo" del escritor son las fuentes
de la revelación sobre la publicación de más obras, aunque por ahora ni
la viuda ni el hijo de Salinger han querido confirmarlo.
El libro
ahonda en el impacto que tuvo la Segunda Guerra Mundial en la
personalidad de Salinger, quien vivió el desembarco de Normandía y
estuvo en la liberación de campos de exterminio nazis (era judío),
además de que trabajó como oficial de inteligencia en la caza de
criminales de guerra.
Teniendo en cuenta el efecto que tuvo en el
escritor su romance frustrado con una adolescente Oona O'Neill (hija del
premio Nobel Eugene O'Neill, quien le dejó en 1941 para casarse con un
muy maduro Charles Chaplin), hay quien habla de un "desarrollo
atrofiado" en su personalidad, que se habría mantenido muy vinculada a
su época juvenil.
El
hecho de que sus personajes más fueran adolescentes (como Holden
Caulfield de El guardián entre el
centeno y que Salinger, según el libro,
tuviera sonados asuntos amorosos con dos adolescentes, alimentan la idea
de que rehuyó un mundo que no le gustaba por la guerra y que le acosó
con una fama que le molesta, para refugiarse en su juventud perdida y en
la religión (experimentó religiones orientales, como el budismo o los
vedas hindúes).
El libro, de 698 páginas, tiene una estructura un
poco "descuidada", según la crítica del New York Times, y no siempre usa
fuentes directas, ya que en ocasiones se usan citas y artículos
aparecidas anteriormente, a veces fuera de contexto.
La película incluye, además de amigos, expertos o escritores como Tom
Wolfe, caras conocidas como los actores Edward Norton o John Cusack que
explican la influencia de las obras de Salinger en sus vidas.
También recuerda que el asesino de John Lennon en 1980 y el hombre que
intentó matar a Ronald Reagan en 1981, así como otro asesino
estadounidense menos conocido, estaban obsesionados con El guardián entre el
centeno.