miércoles, 22 de julio de 2015

'Los malos', de Leila Guerriero, un retrato de la perversidad humana en América Latina

Guerriero ha explicado, que el libro está pensado como un todo, como un mapa global de la maldad en Latinoamérica bajo todas sus formas

Leila Guerriero, periodista y escritora argentina.


Los Malos, edición recopilada de Leila Guerriero./lainformacion.com
La columna vertebral del mexicano Santiago Meza, El pozolero, estaba muy dañada. Incluso, su doctor le había advertido que si continuaba como obrero de la construcción, quedaría invalido. Así que Meza cambió de trabajo, y se convirtió en el que todas las noches disolvía en soda cáustica los cuerpos de las víctimas de los narcos. Evitó la discapacidad, pero no la cárcel.

Este es uno de los 14 perfiles incluidos en el libro  Los Malos (Universidad Diego Portales), elaborado por periodistas latinoamericanos y dirigido y editado por la periodista y escritora argentina Leila Guerriero.

Guerriero ha explicado, en declaraciones a Europa Press, que el libro está pensado como un todo, como un mapa global de la maldad en latinoamérica bajo todas sus formas. O como ella misma escribe en el prólogo, "un libro de perfiles que dibuje un mapa oscuro e inverso de América Latina".

"Es una radiografía, una muestra de los patrones por los que corre lo peor de lo más bajo de la miseria humana en América Latina. Quería que cada una de las personas perfiladas fueran malos con recorrido, con convicción, no podía ser alguien que hubiera cometido tan solo un crimen. Eso es un caso policial", ha añadido la periodista argentina.

Torturadores y asesinos

Además del caso de El pozolero, el libro incluye al chileno Manuel Contreras, creador de la policía política de la dictadura de Augusto Pinochet, al argentino Jorge Acosta, líder del centro de detención clandestino de la dictadura militar de su país, al colombiano Alejandro Manzano, paramilitar, sicario y descuartizador en más de cien crímenes confesos.

También cuenta la historia del chileno Julio Pérez Silva, acusado de violar y matar a 14 mujeres, de la argentina Mirta Antón, juzgada por 211 delitos contra militantes de izquierda en la década del 70, la brasileña Bruna Silva, que degolló, destazó, cocinó y devoró a varias mujeres, el venezolano Wilmer Brizuela, al mando de un ejército de reclusos capaz de extender su zarpa dentro y fuera de la cárcel, o del argentino Rubén Ale, asociado a la trata de mujeres.

Asimismo, narra las semblanzas del panameño Luis Antonio Córdoba, policía que se ganó el apodo de 'el inventor del miedo' durante la dictadura, del argentino Norberto Atilio Bianco, médico cargado de atender los embarazos y partos de las torturadas por la dictadura, del peruano Féliz Huachaca Tincopa, integrante del movimiento Sendero Luminoso, de la chilena Ingrid Olderock, entrenadora de perros con los que violaba a los detenidos durante la dictadura de Pinochet, o del salvadoreño Miguel Ángel Tobar, miembro de la Mara Salvatrucha y asesino de prostitutas, viejos, y rivales.

"Son productos de nuestra contemporaneidad política. Contreras y Acosta no hubieran sido posibles en un país sin una dictadura tan terrible como la argentina o la chilena. En un contexto democrático, estos tipos hubieran buscado otros caminos. Detrás de estos malos hay una trama social y política que se sostiene en una estructura de corrucion, sobornos e impunidad", ha explicado Guerriero.

Según la escritora argentina, la apuesta principal del libro, y por ende uno de sus mayores retos, fue el de humanizar a estos 'malos'. "Es mucho más perturbador que mostrar un vecino, que nos los topamos en la panaderia y en el supermercado, que pasea con sus hijas, pero que durante sus horas de trabajo tortura embarazadas con una picana eléctrica", ha asegurado.

'Los malos' es la segunda colección de perfiles que edita Guerriero. El primero fue 'Los malditos', un compendio de semblanzas sobre escritores cuyas muertes (y vidas) se dieron en circunstancias singulares. "Esta vez fue algo distinto, ya que en los malditos elegí yo los perfiles y después pensé en quiénes podían escribirlos, y en este caso fue al revé, aunque hubo algunos casos en los que ya yo tenía claro que tipo de perfiles quería, como en Colombia o en México", ha afirmado Guerriero.

La periodista ha adelantado que ya existe un tercer proyecto similar, aunque prefiere no revelar sobre qué tratará. "No es tan densa como 'Los malos' y 'Los malditos', sino que es una idea provocadora e insolente", ha manifestado.