miércoles, 5 de marzo de 2014

Leer ficción potencia la empatía

Estudio revela que las lecturas de este género potencian la capacidad de identificar las emociones y los pensamientos ajenos

Las personas que leen ficción literaria se vuelven más sensibles respecto a los sentimientos de los demás./elespectador.com, agencia SINC
Cuando en 2012 la escritora Louise Erdrich obtuvo el premio nacional de literatura de EE.UU., por su novela The Round House, no sabía que su obra estaba contribuyendo a incrementar las habilidades sociales de sus seguidores. Este y otros títulos novelísticos han servido a dos investigadores del Nuevo Centro de Investigación Social de Nueva York para concluir que las lecturas de ficción ayudan a las personas a identificar mejor las emociones ajenas.
“Hemos utilizado diferentes tipos de textos”, indicó a la agencia de noticias Sinc David Comer Kidd, uno de los autores del estudio. “Seleccionamos extractos de los primeros capítulos de algunos libros que fueron finalistas de los premios nacionales de novela o bestsellers en Amazon, y algunas historias cortas de la colección de ganadores del Premio O. Henry en 2012”, añadió.
Los expertos hicieron tres pruebas basadas en la teoría de la mente (TdM), que refleja la capacidad de un individuo de percibir las emociones y los pensamientos de los demás.
El modelo tiene dos componentes: una parte cognitiva y otra emocional. “La TdM cognitiva se refiere a nuestra habilidad para reconocer lo que otra gente piensa y cree acerca del mundo que la rodea”, explicó Comer. La afectiva, por su parte, se refiere al nivel de percepción y apreciación de los sentimientos de los demás.
Los resultados de las pruebas demostraron que una simple lectura corta de ficción literaria lleva a un incremento inmediato en los resultados de las pruebas de la TdM. “Este efecto fue igual de palpable en las personas que ya estaban familiarizadas con este tipo de textos y en aquellas que no solían leerlos”, señaló el investigador para Sinc.
Los investigadores realizaron tres experimentos para determinar la magnitud de las habilidades sociales de los participantes. Uno de ellos fue el test de los ojos de Baron-Cohen, que consiste en pedir a los sujetos que describan las emociones de una persona cuya mirada aparece en una fotografía. El segundo, similar, fue la prueba de reconocimiento de expresiones. Y por último utilizaron el test de Yoni, el cual mide la capacidad deductiva del participante respecto a los pensamientos y sentimientos de otras personas.
Según los autores, las personas que leen ficción literaria “calibran los sentimientos” de los demás con mayor precisión en comparación con los que prefieren otro tipo de géneros o con los que no leen nada en absoluto.
“La ficción supone un desafío para las convicciones de los lectores y los fuerza a descifrar las mentes de los personajes. Eso los hace más sensibles”, sostuvo David Comer.
El estudio, publicado recientemente en la revista Science, recalca el valor de la literatura para las sociedades y la necesidad de dar prioridad a las artes y las humanidades en las escuelas.
“Vivimos rodeados de ficción: libros, televisión y películas, pero sabemos muy poco acerca de cómo nos afecta psicológicamente”, destacó Comer. Para los investigadores, este tipo de estudios revelan el papel de la lectura en la construcción de sociedades más solidarias y tolerantes.