Una de las novelas cumbre de la literatura española del pasado siglo
XX es Tirano Banderas, publicada por el literato Ramón María del
Valle-Inclán en 1926 y que narra las peripecias de una dictadura en un
ficticio país americano
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Tirano Banderas, una novela de Valle-Inclán que vio la luz en Salamanca./lainformacion.com |
A pesar de que fue en 1926 cuando vio la
luz, se da la circunstancia de que sus primeros capítulos ya se pudieron
leer previamente en una modesta publicación universitaria que se editó
en Salamanca en 1925.
Según explica el escritor y director de la
Fundación Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, Gonzalo Santonja,
esta publicación se llamaba 'El Estudiante' y fue "la primera revista de
oposición al dictador Primo de Rivera".
Se gestó en la Universidad de Salamanca por el catedrático Wenceslao Roces, con Miguel de Unamuno
en el exilio, y contó con el apoyo de intelectuales "muy importantes"
del momento, que compartían páginas con relatos de estudiantes
desconocidos y que también se sumaban a la causa.
Este proyecto llamó la atención, por ejemplo, de Federico García Lorca,
que llegó a publicar en ella sus versos, o de Ramón María del
Valle-Inclán, quien quiso colaborar también con la entrega de textos.
En
su caso, Valle-Inclán aportó las primeras peripecias de Tirano
Banderas, que se editaron en 'El Estudiante' como "folletón", por
entregas, señala el director de la Fundación Instituto Castellano y
Leonés de la Lengua.
VALOR ACADÉMICO
Gonzalo
Santonja destaca el valor de estos textos porque fueron "un anticipo"
de lo que luego sería la novela completa, incluso reconoce que el
estudio de primeros capítulos es "muy interesante" porque Valle-Inclán
corrigió gran parte de ellos en el periodo que transcurre entre su
presencia en 'El Estudiante' y como novela en la calle.
De esta
forma, los que lean los párrafos iniciales de la revista estudiantil de
Salamanca y los definitivos que llegaron a la imprenta como obra
completa podrán ver las "variantes" y los cambios que propició su autor
en ese periodo.
Estos textos originales se pueden ver hasta el 1
de marzo en la Sala de las Comarcas de la Diputación de Salamanca, que
acoge una exposición con manuscritos, primeros números y ediciones
posteriores que marcaron los orígenes de 'El Estudiante'.
Así se puede conocer un proyecto que
contó desde sus inicios con el apoyo de personalidades como Giménez
Siles, Gregorio Marañón, Fernando de los Ríos, Rafael Quiroga Plá,
Salvador M. Vila, Américo Castro, Alfonso Reyes o Guillermo de la Torre.
En
esta exposición, titulada 'El Estudiante de Salamanca. La verdad a la
vista', se repasa la vida de esta revista que publicó 13 números en
Salamanca, luego creció en Madrid
con otros 14 números y a continuación, por la presión de la censura
previa, se "transformó" en editoriales que dieron cabida a nuevas obras
españolas y de autores de otros países.