Siete libros esenciales para la Feria de Madrid
Lo negro y criminal, jamás pasa de moda, porque el crimen vive presente en todos los tiempos./Ilustración de Fernando Vicente./elpais.com |
Estamos en la última semana
de la Feria y vamos a ver si nuestra locura lectora y nuestra pasión se
contagia a los queridos lectores y los libreros salvan algo de la
temporada. Para ello les traemos seis recomendaciones realizadas por
seis tipos distintos y apasionados. El plantel: dos escritores, Claudio Cerdán y Víctor del Árbol,
que han tenido a bien poner su sabiduría a nuestro servicio (no sé cómo
agradecer su generosidad); un sabio de lo negro como es Antonio Lozano
(más generosidad gratuita); una dama de lo criminal que no pasa desapercibida aunque quiera; el gran Guillermo Altares, que sabe de todo (y si no lean lo que está escribiendo
sobre la I Guerra Mundial o sobre el desembarco de Normandía) y que ha
leído más que nadie y, por último, un humilde servidor. Vayamos con las
propuestas. Compren libros, lean y disfruten.
Propuesta doble y original. Puede que
recomendar libros de 2014 en mayo parezca precipitado, pero os aseguro
que se ha publicado mucho y muy bueno durante estos meses. De entrada,
os aconsejo que le echéis un ojo a la magnífica reedición que ha
publicado Reino de Cordelia de La noche a través del espejo, de Fredric Brown. Un clásico extraño que merecía rescatarse. Y barriendo para casa, pasaréis un buen rato leyendo Todos los buenos soldados,
de David Torres, editado por Planeta. Una historia de asesinos y
venganza con Gila perdido entre legionarios brutos y castizos. Ambas
novelas son una gozada. No las pierdan de vista. Más sobre la novela de David Torres en Elemental.
Los corruptores,
Jorge Zepeda (Destino). El libro de género que últimamente más me ha
sorprendido es Los corruptores del periodista mexicano Jorge Zepeda. No
es una “narconovela” más, ni se centra en lo anecdótico de la violencia
en el país norteamericano. Zepeda pone en liza toda su sabiduría
periodística para, partiendo de un análisis clásico (la desaparición y
asesinato de una famosa actriz, Pamela) y de un personaje arquetípico
como Tomás, periodista desencantado del oficio que debe cubrir la
noticia, desentrañar los vínculos de corrupción que unen al narcotráfico
con la clase dirigente, las argucias, las amenazas, el ejercicio de la
coacción que los dueños del Poder, los corruptores, utilizan para
dominar cualquier resorte del Estado. El planteamiento es ágil, actual,
valiente y uno no tiene dificultades en asociar la ficción que Zepeda
propone con la realidad cotidiana que conoce. Además, la historia de
lealtad y de amor entre los tres amigos que junto a Tomás forman la
hermandad de los azules le da un componente distinto a las habituales
novelas de esta clase. No se olvida del papel cuestionable de la prensa
en México. Muy recomendable. Más sobre él en Elemental.
La rubia de ojos negros,
John Banville (Alfaguara). John Banville recibió un encargo que parecía
una misión imposible: resucitar a Philip Marlowe. El problema no está
en que Banville o Benjamin Black, el seudónimo que utiliza para sus
novelas policiacas, no sea un gran escritor, incluso a la altura de
Raymond Chandler, sino en la inmensa dificultad que supone hacer un
pastiche con un personaje como Marlowe. Recrear la gracia, el cinismo,
el verbo acerado lleno de cargas de profundidad hacia la sociedad en la
que vive, de Marlowe no parecía cosa fácil, incluso se podría decir que
era una tremenda insensatez. Pero, sin embargo, funciona. La rubia de
ojos negros no es sólo un gran relato, es un gran relato de Philip
Marlowe. Banville logra resucitar al detective, incluso ha escrito una
novela que se parece a las novelas de Chandler y que transcurre en el
lugar y la época en que ocurren las novelas de Chandler. Una lectura
más que recomendable, incluso para los más escépticos. Más sobre ella en Elemental.
El último verano en la isla,
John Theorin (Roja&Negra) Los registros oficiales de la ola
migratoria que experimentó Suecia en el primer tercio del siglo XX dan
cuenta de un individuo que, en vez de tomar el masivo camino del Nuevo
Mundo, optó por recalar a Rusia para contribuir, se supone, a la
construcción del sueño comunista. A partir de esta brumosa figura real,
imaginando su retorno a su tierra natal tras diversas pesadillas y una
venganza pendiente, Johan Theorin ha levantado la última pared maestra
de su tetralogía sobre Öland, isla de sus ancestros a rebosar de
leyendas que lo asustaban de niño. El último verano en la isla supone el
negativo de lo que cualquiera entendería por unas idílicas vacaciones
en el acogedor Norte. Cuando por fin sale el sol, irrumpe con él la
oscuridad del individuo. Quizás también espectros con olor a pescado.
Mamut,Esther
García Llovet (Malpaso). Mamut es una de esas novelas que probablemente
no veáis en las listas de más vendidos. Y en gran parte pienso que es
por tratarse de producto nacional. Cuidamos poco a nuestros escritores, y
es una verdadera lástima porque los tenemos y de calidad. Un ejemplo de
ello lo tenemos con Mamut, de Esther García Llovet, una de esas novelas
que si te las dieran a ciegas dirías que está escrita por un americano
de la Texas más profunda. Y es que tiene un poco de todo: un poco de
road movie, un poco de western, un poco de melancolía, un poco de
persecución, un poco de búsqueda. La persecución, la de Junot, que busca
desesperadamente a Toro para saldar cuentas. La búsqueda, la de
Martina, que se dirige a "la fiesta del milenio". Y ambos objetivos
están más cerca de lo que Junot y Martina se creen.
Mamut es una de esas novelas que te dejan ver sólo un poco
de lo que pasa en la trama. Apenas hay descripciones, los diálogos son
muy ágiles, y los lugares recorridos se van sucediendo pisada tras
pisada. No te da una visión de conjunto, sólo te muestra lo que
necesitas saber en cada momento, con personajes entrando y saliendo a
cada página, construyendo un terreno sobre el que pisar a oscuras,
soltando las claves en el momento preciso, atrapándote y obligándote a
seguir leyendo para poder entender de qué va todo esto. Por qué ha huido
Toro, qué es mamut, qué está buscando Junot. Como colofón, la preciosa
edición de la Editorial Malpaso, con sus característicos cantos
coloreados. Una delicia.
JUAN CARLOS GALINDO
Yo fui Johnny Thunders,
Carlos Zanón (RBA). Quizás es porque soy un chico de barrio y esta es
una novela de barrio. Quizás es porque me gusta Zanón, porque me gusta
una novela que no se deja llevar por un personaje protagonista potente y
que valdría para llenar la escena. Quizás es que me gustan las novelas
que duelen y que me llegan y esta lo es. Quizás. Hay otros libros muy
buenos este año y me duele desechar algunos, pero me quedo con este. Por
auténtico, por radical, por ser una voz nueva dentro del panorama
negro. Lean y disfruten. Lo demás, ya lo dije en este post sobre la obra.