Los investigadores que a finales de abril comenzarán a buscar los restos de Miguel de Cervantes en el Convento de las Trinitarias de Madrid aseguran que en unos meses estará resuelto el enigma de dónde reposa el escritor español más universal, cuyos restos aspiran a encontrar con un noventa y nueve por ciento de probabilidad
Miguel de Cervantes Saavedra.Retrato atribuido a Juan de Jáuregui (c. 1600)./internet.lainformacion.com |
"Yo estoy convencido de que Miguel de Cervantes está allí y de que va
a ser relativamente rápido encontrarlo", sostiene en una entrevista con
EFE Luis Avial, que tratará de localizar mediante infrarrojos y radares
el punto exacto del convento donde pudo ser enterrado Cervantes.
Han
tenido que pasar casi 400 años desde su fallecimiento el 23 de abril de
1616 para que un proyecto de enjundia verifique si se cumplió el último
deseo del escritor: ser enterrado en el convento de las Trinitarias,
ubicado en el madrileño Barrio de las Letras, en el que profesó su hija
sor Isabel.
Y el proyecto no lo ha liderado ninguna institución,
sino que ha partido del empeño de dos investigadores que, según cuentan a
EFE, soñaron con revertir el hecho de que los restos del escritor que
dio vida al Quijote no estuviesen localizados.
"Un día sale a la
conversación que la tumba de Cervantes está perdida, se te despierta una
curiosidad tremenda y pasas los días buscando información hasta que te
das cuenta de que el tema no sólo es apasionante, sino que es factible",
resume el historiador Fernando de Prados, encargado de documentar el
proyecto.
Cuatro años de investigación han demostrado al escritor
Fernando de Prados que hay pocos interrogantes sobre que Cervantes fue
verdaderamente enterrado en ese convento, donde tampoco se han
documentado posteriores exhumaciones.
Luis Avial, centrado en la
parte técnica, considera que, de cumplirse esas premisas, los restos se
encontrarán "sin la menor duda". "Buscamos en sólo doscientos metros
cuadrados a un señor que murió con 69 años y que tenía unas
características físicas muy concretas, y tan sólo ha habido allí entre 6
y 9 enterramientos. Sinceramente, hemos tenido éxito en investigaciones
mucho más difíciles", afirma este investigador.
De hecho, tanto
Avial como De Prados coinciden en que el escollo principal con el que
pueden topar es que el edificio donde se busca a Cervantes es Bien de
Interés Cultural (BIC), lo que exige un grado de protección muy alto por
el valor del convento en sí mismo.
"La problemática que tenemos
es técnica, pero los forenses irán abriendo con mucho cuidado y sin
hacer daño al patrimonio", explica a EFE Avial. Su compañero de Prados
apunta: "Cualquier actuación que se lleve ahí se va a mirar con
atención, pero por encima de eso debe recordarse una cosa: estamos
hablando de Cervantes".
La primera fase de los trabajos -financiada por el Ayuntamiento de Madrid-
comenzará previsiblemente a finales de este mes y consistirá en
localizar en tan solo cuatro o cinco días las cavidades donde hubo
enterramientos con un radar y un infrarrojos.
Una vez terminada la exploración se elaborará un informe que concluirá si es viable o no seguir adelante con la excavación.
Si
se continúa, el proceso será liderado por el forense Francisco
Etxeberría, quien ha participado en casos como la exhumación de
asesinados en la Guerra Civil española, en el análisis de los restos del
presidente chileno Salvador Allende y en el informe pericial de la desaparición de los hermanos Bretón.
"Una
vez que empiecen a trabajar, en un mes los forenses podrán tener
localizados los restos", explica Luis Avial, quien confía en que el
proceso "va a ser rápido" y que "al 99% de probabilidad" se van a
encontrar los restos del escritor.
El año que viene, en 2015, se
celebra el cuarto centenario de la publicación de la segunda parte de El
Quijote y en 2016 se cumplen cuatro siglos de la muerte del escritor.
"Fíjese lo que supondría para España encontrarlo", añade Fernando de
Prados.
Si
las cosas son como estos investigadores aseguran, 400 años después de
su muerte estamos a tan sólo unos meses de resolver la gran incógnita
que rodea a Cervantes: dónde reposa el escritor más universal en lengua
española.